Nueva entrega, la tercera de relatos de Ruiz-Borau. Aunque variada en su temática y en el tiempo en que está situado cada uno de los cuentos, llevan el sello de su autor. Un profundo conocimiento del alma humana mostrada, con sus grandezas, en ocasiones, y miserias las más de las veces aunque los sentimientos de unos y otros estén tratados con benevolencia.
En cuanto a las situaciones, están contadas sin “añadidos”, tal como los relataría un espectador avispado. De lectura fácil nos ilustrara y distraerá. También es posible que colabore a que seamos algo escépticos, si no lo somos ya, lo cual no es malo después de todo.