Este poemario es asimétrico, azul como un cielo limpio, libre, sin mácula, “materia estéril”. Estéril a semejanza de la acepción grata de la palabra: Todo objeto o sustancia libre de microorganismos y de cualquier forma de vida, por tanto, es inocente en su contenido, en sus palabras y en su intención.
La autora plasma sentimientos que, desea compartir con sus lectores, con el solo y firme propósito de tocar su corazón con las palabras y crear una corriente donde ambos, lectores y autora se sientan conectados.